Llueva Se han cubierto de bruma las palabras y los sentimientos comienzan a estar borrosos. Respiro niebla. Se me atraganta el futuro en la garganta. Yo quiero azules y tú vienes al baile disfrazada de tormenta. Prenda Es verdad. No miento cuando digo que cada vez temo menos a los truenos. Tampoco tengo miedo al fuego. Aprendí a curarme las ralladuras de tercer grado: sé abrasarme mientras abrazo. ¿conoces tú la receta de una piel en llamas? Es hermoso recorrer un cuerpo e incendiarlo. El infierno de dos cuerpos desnudos es el cielo: el Paraíso.
La guarida de los náufragos ©