Ir al contenido principal

Despertar febril

Es el primer domingo de febrero. Este mes se va más deprisa que los otros. Es un día lluvioso. Quizás todavía estés durmiendo tras una noche larga en lugares oscuros. Esos lugares donde se habla sólo con miradas y gestos. Probablemente a tu lado haya una persona envuelta en tus sábanas rojas. Tienes miedo a despertarte porque no sabes si te sorprenderás al ver su cara. Está sonando un piano de fondo. La habitación es un jazz desordenado. Tu ropa, su ropa, su reloj, su pulsera. Todo es una melodía extraña. La habitación está impregnada de tabaco y sexo y aún retumba en tu cabeza el último ron con cola. ¿O no fue el último? Cada vez llueve más fuerte. Tú intentas convencer a tus párpados de que todavía no es el momento de levantarse. El ruido del agua y del piano no te ayudan en este peculiar duelo. La otra persona respira muy fuerte. Está profundamente dormida.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Capitán Nemo

En la casa de mis abuelos se escondía el Nautilus. Recuerdo ahora, muchos años después, aquellas cintas Betamax y el viejo vídeo gracias al cual Omar Sharif aparecía en la pantalla del televisor convertido en el Capitán Nemo. Yo entonces no sabía quién era Omar Sharif, pero sí que alucinaba con las aventuras del Capitán Nemo sumergido en las profundidades del mar, al mando de aquel fantástico submarino. Sentía una mezcla de admiración, miedo y curiosidad hacia el personaje, hacia sus aventuras. Mejor dicho, eso es lo que creo hoy que sentía en aquel momento. La música inicial era hipnotizadora y ha llegado hoy con un billete de regreso a mi infancia. ¿Estaba ahí el espíritu de mi germen viajero? ¿En esa mezcla de curiosidad y cobardía? ¿En querer mirar y esconderse al mismo tiempo? La respuesta es, como la isla de Verne, misteriosa. Y me gustaría mucho conocerla, pero no me atrevo a responderla. https://www.youtube.com/watch?v=6jVEOlPVRWM

El poeta puede

El poeta puede ver el beso medio lleno o medio vacío El poeta lima El poeta lame El poeta no tiene lema El poeta le busca todas las vueltas a Roma rema que te rema rima que te rima de ramo en ramo El poeta puede volar por los aires y estrellarse en el cielo. Acaso entonces se da cuenta: su poema ha llegado a su ocaso.

Constelación KTM

Por las noches hay perros con la mirada azul solo la luz de sus ojos desafía a la oscuridad de las calles de este valle, -ciudad de ciudades- que duerme, sueña y despierta rodeado de montañas fugaces que, como estrellas, aparecen y desaparecen según los deseos de las nubes.