Ya no es tan valiente el viento,
aunque llegan aromas de aire fresco.
Oigo de fondo el ruido de trenes,
de maletas y de flechas.
Siento de nuevo el miedo
como el cuello que aprieta una corbata.
Pero también escucho la música,
las melodías de amigos
de diversas geografías.
Guardo en mi memoria
todas vuestras caras
en lo oscuro
de esta madrugada
aunque llegan aromas de aire fresco.
Oigo de fondo el ruido de trenes,
de maletas y de flechas.
Siento de nuevo el miedo
como el cuello que aprieta una corbata.
Pero también escucho la música,
las melodías de amigos
de diversas geografías.
Guardo en mi memoria
todas vuestras caras
en lo oscuro
de esta madrugada
Comentarios